¡En mi casa no!

¡Dios! Como es posible que un equipo tan bueno como los New York Giants puedan recetar a sus contrincantes en cualquier lugar... menos en casa. ¡Dios! Todo es posible en la viña del señor y no llamaría a la victoria de los Philadelphia Eagles 23-11 en el Giant Stadium, precisamente un milagro divino celestial.

Pensé que la calamidad de jugar en casa se había acabado con el anillo de campeón del año pasado para los Giants, pero un momento, esperen, sí, los Giants ganaron sus últimos ocho juegos en calidad de visitantes, incluso el Super Tazón ante los místicos New England Patriots.

Y parecía que tenía razón cuando esta temporada ocho de sus 13 victorias fueron en casa y sólo tuvieron una sola derrota en su propio patio... pero adivinen contra quien fue, ¡Eso es correcto! contra Philadelphia.

Aquella noche del siete de diciembre fue de Brian Westbrook, quien anotó un TouchDown por tierra y agregó otro al recibir un pase de Donovan McNabb. En el último juego de la temporada para los más recientes campeones del Super Tazón McNabb lanzó para anotación y sumó uno al correr por tierra.

Donovan McNabb corrió para TD (FOTOS CORTESIA AP)

Cinco derrotas, sólo dos fueron en casa y sólo una perdida en postemporada. ¿Qué se puede decir? así es la NFL.

El próximo fin de semana se definen los campeones de conferencia, cuando los Pittsburgh Steelers reciban a los Baltimore Ravens en la lucha por la Americana y en la Nacional estarán los increíbles Arizona Cardinals esperando en casa por los Philadelphia Eagles.

En la próxima edición hablaremos de los sorprendentes Cards...

mynameisteo@yahoo.com