jueves, 27 de junio de 2013

¿Qué pasará con Aaron Hernández?



No lo sé.

¿Qué pasará con Aaron Hernández? Repito: No lo sé. Creo que el único que lo sabe está en el plano de los inmortales, al menos por ahora.

El vendaval de eventos que ha ocurrido en la vida del ala cerrada de descendencia puertorriqueña ha aumentado de forma acelerada.

Hace seis días, el ahora ex jugador de New England Patriots, fue acusado por obstruir la justicia en el caso del asesinato de Odin Lloyd. Luego, el pasado miércoles 26 de junio, lo arrestaron y es el principal sospechoso en la muerte del atleta amateur, que jugaba para Boston Bandits, en la Liga de Fútbol Americano de Nueva Inglaterra.

Pero ¿Por qué un muchacho de 23 años con 40 millones de dólares asegurados en su futuro cercano, jugando en un equipo ganador, arriesgaría de esa forma su vida?

Al parecer la raíz viene de un pasado oscuro que había sido alejado de las luces de la prensa en su carrera. Aunque TMZ asegura que Hernández perteneció a una pandilla antes de entrar a la NFL, no hay otras fuentes que confirmen esta teoría.

Las declaraciones por un policial adjunto a la investigación, publicadas en The Globe son más escalofriantes. Al parecer Hernández habría estado involucrado en un doble homocidio el año pasado, justo antes de arrancar la temporada 2012. Lloyd, lo habría chantajeado con información y fue anulado.

Para la madre del jugador, Terri Hernández, la inocencia de su hijo será demostrada al terminar el caso, as{i se lo aseguró a The Bristol Press.

Sin embargo, las pruebas, los testimonios y el historial del caso no lo conocemos. Ni la prensa más allegada está clara de lo que ocurre, menos nosotros que estamos a miles de kilómetros del lugar de los hechos.

Desde el pasado miércoles se le han atribuido una serie de elementos a la investigación, desde el mero punto de vista de la especulación. Está en manos de los fiscales determinar el futuro del jugador NFL.



Mientras tanto, el ala cerrada, ahora agente libre, está bajo la lupa de 31 equipos que esperan la decisión de su caso para hacerle una oferta. Con sus 18 anotaciones, 1959 yardas acumuladas en recepciones y su habilidad para jugar desde el backfield o bloquear, más de un gerente estará frotándose las manos para ofrecerle trabajo.

Todos menos en Nueva Inglaterra, que no dudaron en cortarlo una hora después de haber sido arrestado. Algo sabrán que nosotros no sabemos. Pero francamente, no me sorprendería verlo vestir de nuevo el uniforme de Patriots.

@mynameisteo

1 comentario:

Madera dijo...

Dices que no te sorprenderia verlo de nuevo en el uniforme de los patriots?


creo que eres la persona mas optimista del mundo.