Es que estos cinco casos son dignos de estudio ¿Qué les ocurrió a estos pasadores que no pudieron adaptarse a la NFL? Aquí les dejó mi aproximación.
Seneca Wallace: fue elegido en el draft 2003 por Seattle Seahawks, que fueron atraídos por su atleticismo y habilidad para cubrir la posición de ala abierta y la de pasador. De hecho, algunos expertos señalan que tenía mejores habilidades como receptor, pero insistió en mostrarse como QB.
Las expectativas eran altas cuando salió de Iowa State por su liderazgo. Sin embargo, en sus primeras cinco campañas fue un pasador secundario solido detrás de Matt Hasselbeck.
Luego apareció su gran oportunidad: Cleveland Browns, donde sería titular. Pero no respondió, apenas fue titular en siete encuentros los dos años que estuvo en Cleveland. La última vez que jugó fue el 1 de enero de 2012, en una derrota ante Pittsburgh Steelers.
Este año recibiría la confianza de New Orleans Saints para formar parte del club, sin embargo, no llegó a formar parte del roster a sus 31 años de edad.
Matt Leinart: del grupo de pasadores que chequeamos hoy, Leinart es el que menos excusa tuvo para no adaptarse. Estuvo rodeado de buen talento, como el incomparable Larry Fitzgerald, tuvo una línea ofensiva solida en Arizona Cardinals y fue apoyado por un entrenador en jefe como Dennis Green.
Sin embargo, el primera ronda del draft 2006, no logró cuajar en su primer año y luego fue relegado a un pasador secundario detrás de Kurt Warner.
Graduado en USC, gozó del triunfo universitario por todo lo alto, incluso alzó el Heisman Trophy, por delante de Adrian Peterson.
"Con ver todo lo que le pasó en la NFL, y como han resultado las cosas, entonces Leinart sí se merecía el premio Heisman", se mofó el jugador ante los medios en la actual pretemporada.
Pero luego de cuatro años sin poder mostrar todo su talento en Arizona, pasó a manos de Houston Texans (2011) antes de aterrizar en Oakland Raiders (2012). En la actualidad es agente libre.
Brady Quinn: ¿Cómo olvidar los cantos de los aficionados de Cleveland suplicando por Quinn? El jugador fue firmado en la primera ronda del draft 2007 y entró a una batalla sin sentido con Derek Anderson que terminó con ambos pasadores fuera de la organización.
Quinn era la estrella de Notre Dame y su carisma hizo ser admirado por los hombres y amado por las mujeres. Pero al llegar a la NFL nunca mostró esa garra de liderar equipos a la victoria.
El jugador pasó a Denver Broncos en el 2011 pero nunca llegó a jugar. Para el 2012 fue titular en ocho juegos para Kansas City Chiefs, el peor equipo de la campaña pasada.
Ahora busca un puesto en el roster de Seattle Seahawks.
Colt Brennan: el caso más triste en este grupo de quarterbacks. De lo más alto de los volcanes de Hawaii a ser arrestado en este año por manejar bajo la influencia de alcohol. Brennan lideró a los guerreros del pacífico a una temporada perfecta en el 2007 antes de participar en el Sugar Bowl.
Brennan tiene el récord de más touchdowns para un pasador en la NCAA con 58 anotaciones en una temporada. Pero su particular forma de lanzar el balón por debajo del hombro, no llamó la atención de los equipos NFL.
Fue firmado en la sexta ronda del draft 2008 por Washington Redskins, tuvo la mejor pretemporada para un novato con tres anotaciones y 411 yardas. Una lesión no le permitió jugar en la campaña regular. Luego fue traspasado a Baltimore Ravens y el equipo no dudó en dejarlo libre.
Tuvo una oportunidad para jugar en la UFL con Hartford Colonials en el 2011, pero luego la franquicia desapareció. Para el 2012, fue anunciado como la gran contratación por Saskatchewan Roughriders en la CFL, sin embargo, también firmaron a otros pasadores que relegaron a Brennan al tercer puesto. Fue dejado en libertad para junio.
Troy Smith: Otro ganador del Heisman que terminó por migrar fuera de los Estados Unidos. Smith fue anunciado por Montreal Alouettes como su nuevo mariscal de campo.
El jugador fue fichado por Baltimore Ravens en el 2007, con la esperanza de darle mucho trabajo en el futuro. Pero cuando empezó la carga fuerte, para el 2008, mostró poco talento. Después del 2009 fue dejado en libertad.
Para el 2010 se convirtió en el primer afroamericano en ser mariscal titular de San Francisco 49ers, pero a la llegada de Jim Harbaugh, tuvo pocas oportunidades para mostrar su nivel. Eventualmente Alex Smith obtendría el control de la ofensiva y Troy solo jugó en seis ocasiones desde el arranque.
En el 2011 probó con Omaha Nighthawks de la UFL, pero el único chance que tuvo para jugar fue en el último encuentro de esa temporada.
Pittsburgh Steelers lo acogió para la 2012, pero solo para formar parte del equipo de prácticas. Nunca integró el roster de la temporada.
@mynameisteo
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